La Jefa de Epidemiología de ISSSTECALI, Angélica Pon Méndez, destacó que la pediculosis en la cabeza es una parasitosis ocasionada por los piojos, insectos pequeños de unos 2 milímetros de largo y sin alas.
“Nunca se debe estigmatizar a una persona con pediculosis, toda persona está expuesta al contagio de piojos por contacto directo con la persona infestada. No es un signo de mala higiene, tampoco significa que los niños sean sucios o poco cuidadosos ya que una higiene meticulosa no previene la infestación”, señaló.
Mencionó que la transmisión de piojos es exclusivamente por contacto directo, pudiendo pasar con mucha facilidad de una persona infestada a otra por proximidad, de cabeza a cabeza, o a través del intercambio de objetos personales contaminados, como almohadas, peines, gorras, entre otros artículos, siendo la población infantil la más vulnerable a la pediculosis, la cual puede aparecer a lo largo de todo el año.
La funcionaria estatal advirtió que la hembra del piojo tiene una vida aproximada de un mes, durante el cual pone entre 7 y 10 huevos al día, es decir liendres. Éstas, dijo, son de aspecto nacarado, están firmemente adheridas al pelo y se localizan fundamentalmente cerca de la nuca y detrás de las orejas.
Agregó que las liendres crecen y se multiplican muy rápido, originando al cabo de unas dos semanas nuevos insectos adultos que producen comezón e irritación en la piel, rascado que puede facilitar la infección bacteriana de las lesiones.
En caso de infestación de piojos, recomendó:
· Existen lociones o shampoo antiparasitario, siga cuidadosamente las instrucciones.
· Aplicar el producto exclusivamente en el pelo, desde el cuero cabelludo hasta las puntas.
· Nunca deben utilizarse tratamientos antiparásitos "para prevenir"; podrían generarse resistencias.
· La cabeza no ha de ser rasurada por el hecho de tener piojos.
· Quitar las liendres con la mano o mediante un peine de púa fina.
· Ningún producto tiene eficacia absoluta, por lo que es preciso examinar cuidadosamente el cabello al finalizar el tratamiento por si sobreviven las liendres y fuera necesaria otra aplicación. Puede repetirla a los 7 días.
· Precaución ante el uso de pediculicidas en situaciones especiales: niñas menores de 2 años, embarazadas, ancianas y alérgicas al producto.
· Se aconseja no permitir la entrada de los niños infestados a las escuelas hasta que se les dé el alta médica (48 horas).
Por último, Pon Méndez indicó que si un niño o niña ha padecido en más de 3 ocasiones episodios de pediculosis en un lapso de seis meses, se recomienda acudir al médico para realizar un diagnóstico asociado a esta parasitación continua.
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