En su conferencia “El futuro de las pensiones en México”, el investigador, economista y funcionario aseguró que este es un tema que ha despertado el interés actual debido a que el proceso gradual de la modificación de las reglas que le dieron origen ha ido cambiando, es decir, el sistema que se creó bajo normas especÃficas está dejando de funcionar ahora.
Las razones, adujo, son que la población está envejeciendo más rápidamente, que ya no todos los trabajadores cuentan con un empleo formal que les dé acceso a la seguridad social, pues han ido creciendo por el sistema de contratos, además, de que hace décadas habÃa más empleados activos por cada pensionado, pero al paso del tiempo aumentaron estos últimos, lo que ha derivado en dificultades para este sector poblacional.
También, se registró un aumento de las prestaciones sin que se previera el fondeo futuro de estas obligaciones, y en algunos casos se han politizado las posibles soluciones, “Se trata de beneficios que no siempre es sencillo que concurran las voluntades, pero cuando se entiende que el sistema de pensiones puede estar en serios problemas, es necesario actuar en conjunto”.
Antes, en México existÃa una baja tasa de natalidad y ahora es a la inversa; nacen más personas y viven más tiempo, con más y nuevas enfermedades, sumado a que la tasa de mortalidad de este paÃs también ha disminuido, “Provocando que la liga se estire, es decir, pagar más tiempo a más personas que estén en condiciones de retiro”, manifestó.
El autor del libro “Pensiones en México, la primera crisis”, anotó que los adultos mayores se triplicarán en el año 2050, además de que los pensionados del sector público están aumentando rápidamente; en 2006, habÃa tres millones de pensionados, cifra que se duplicará en 2015.
El economista explicó que cada vez hay menos trabajadores activos que estén en la base financiando a los pensionados que están esperanzados a que exista la suficiencia de recursos para cumplirles con esta prestación, “La ecuación ha cambiado y asà se va a quedar por el resto del siglo, pero como sociedad, tenemos que prever cómo enfrentar este tema”.
Refirió que sin embargo, existen una serie de medidas para el futuro inmediato en México que tiene que ser discutido, además de promover la cultura del ahorro para el retiro voluntario u obligatorio; es necesario que se divulgue el problema para efectuar análisis e involucrar a beneficiarios para que sean los que contribuyan al ajuste de este sistema “Y no estén esperando que alguien de fuera los subsidie”.
Se trata, dijo, de un sistema insostenible que necesita revisarse de una manera general en el paÃs, aunque su futuro debe de ser bueno, pues México tiene la posibilidad de ocuparse los siguientes años para que no se vuelva una catástrofe nacional y no debilite la economÃa, asà como la hacienda pública.
Es un reto, abundó, “Un asunto muy delicado que no podemos dejar pasar, por lo que debemos tener un nuevo sistema nacional de pensiones integrado, financiado y que cubra a la mayorÃa de los mexicanos”.
Por último, el economista presentó su conferencia en la Sala de Espectáculos del Centro Cultural Tijuana (CECUT), acompañado del funcionario de la SecretarÃa de Hacienda y Crédito Público (SHCP), DarÃo Luna, en el marco del Segundo Encuentro Tijuana Innovadora 2012.
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