Por Jaime Flores Martínez
Edén
TIJUANA B.C.-Dedicado a conocer “el terreno que pisa” para evitar las zonas lodosas, el recién nombrado comandante de la Policía Federal Antonio Rodríguez Lugo, comenzó a tocar puertas.
Lejos de llegar con una postura insolente y arrebatada, Rodríguez Lugo se muestrea en restaurantes y sitios públicos de Tijuana donde se dedica a estrechar manos y a regalar sonrisas.
Y aunque Rodríguez tiene cara de pocos amigos, es un hombre espigado cuya personalidad se amplía por el uniforme negro. Quienes lo observaron saludar con tanta amabilidad pensarían que se trataba de un publirrelacionista vestido de policía.
Ojalá que este hombre haga su parte en los asuntos de seguridad que requiere la ciudad, pues según su dicho, esta ciudad tiene la fama de ser “un paraíso” en el centro del país. Hace justo 2 semanas, el comandante Rodríguez Lugo llegó procedente del Estado de Sinaloa donde la violencia es parte del panorama urbano.
Por eso se siente en Tijuana como Adán se sintió en el edén.
Choque
Muy satisfecho debe sentirse el ex alcalde de Tijuana Jorge Ramos Hernández con el trato que recibió luego de impactarse en su vehículo por exceso de velocidad.
El ex alcalde no sólo recibió muy buen trato de la mayoría de los medios de comunicación, sino muy especialmente de la autoridad policiaca. Observadores de personajes involucrados en el servicio público no conciben como el secretario de Seguridad Pública de Tijuana Alberto Capella Ibarra se mantuvo al margen de ese incidente.
Muchos esperaban que Capella desenfundara frente a Ramos en remembranza al agravio que aplico hace 5 anos. Hasta los más ingenuos recuerdan que Jorge Ramos trato con la punta del pie a Capella en aquellos tiempos que Tijuana era de Ramos.
El entonces alcalde destituyó a Capella para incrustar al tristemente célebre Julián Leyzaola Pérez en la Secretaría de Seguridad Pública Municipal. Capella se fue con una estaca clavada en un costado, aunque seguramente la herida logro cicatrizar.
Pocos deben entender que Capella pudo morderse un dedo para no salir a lanzarle la caballería a Jorge Ramos. Algunos críticos de Capella especulan sobre “el miedo” que pudo tener a la reacción del ex presidente municipal, quien pudo sacarle algún “trapito que tiró” durante su desempeño como secretario de seguridad pública.
Este señalamiento deja entrever que Jorge Ramos le tendría guardada “una carta” marcada a Alberto Capilla y por ello se entendería porque se mantuvo al margen.
Considerado hombre protagónico, Alberto Capilla hubiese salido ofrecer una conferencia de prensa para dar detalles sobre el accidente automovilístico provocado por Jorge Ramos la mañana del pasado martes. Ahi resultaron lesionados tres miembros de una familia.
Sin embargo Jorge Ramos recibió un trato generoso que para muchos resulta extraño. Si hubiese sido algún hijo de vecino las cosas serian distintas. Sin embargo, Capella ni siquiera se refirió al papel de los amables policías. Esto tiene decepcionados a muchos de los detractores de Capella: El protagónico resultó cauto.
Respecto al manejo de los medios de comunicación, habrá que observar que la mayoría de los reporteros se limitaron a divulgar el hecho sin aplicar los adjetivos acostumbrados. Se habló de un choque por alcance donde el protagonista principal fue Ramos, quien tripulaba una camioneta de reciente modelo.
Más allá de la marca y el modelo, la mayor parte de los periodistas coinciden en que la información oficial confirma que conducía con exceso de velocidad. El hecho es que los medios de comunicación se portaron generosos con un personaje calificado de polémico por su actuación como alcalde de la ciudad de Tijuana. Por cierto que el actual alcalde, el priista Carlos Bustamante ha ignorado el tema.
¿Financiamiento?
Casi desapercibido pasó el anuncio del gobierno federal al destinar 100 millones de pesos para la seguridad pública en Baja California. Seguramente el anuncio debió hacerlo un funcionario con peso específico, porque esto recayó en el secretario de Desarrollo Social del Estado Pablo Alejo López Núñez.
Este hombre reconoció que --en relación a la cruzada nacional contra el hambre--, todavía no se firma el convenio para abatir la pobreza alimentaria. El dinero mencionado se canalizará hacia la reducción de causas que provocan la delincuencia. El dinero se repartirá equitativamente entre Tijuana y Mexicali.
Lo importante será observar detenidamente la aplicación de esos recursos, pues coincidentemente, el dinero entrará al Estado al mismo tiempo que inician las campañas políticas. Mucha coincidencia.
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