Esto ha ocasionado deslaves, inundaciones y severos daños materiales que han afectado a muchos hermanos y hermanas, particularmente en Guerrero, Jalisco, Colima, Chiapas, Hidalgo, Nuevo León, Tamaulipas, Oaxaca, Michoacán, Nayarit, Veracruz, Colima, San Luis Potosí y Morelos.
Y la mejor forma de acercar nuestra ayuda es a través del recurso económico, que facilita los apoyos y reactiva la economía local. Los donativos en especie se recomiendan sólo a las diócesis vecinas o zonas cercanas y que cuentan con los medios para su transportación.
El Excmo. Sr. Arzobispo Don Rafael Romo Muños sumándose a la preocupación e iniciativas del Episcopado Mexicano de solidarizarnos con quienes están sufriendo esta emergencia, solicita se entregue el 20% de la colecta al economato diocesano en la brevedad posible, para que oportunamente se haga la entrega a Caritas Nacional.
Que Dios los bendiga.
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