Opinión Columna Política Hugo Rea

El PAN y “su democracia”

Por Hugo Isaac Rea Torres
La hegemonía mantenida durante casi cuatro lustros por el Partido Acción Nacional (PAN) en Baja California parece desmoronarse, luego de las inconformidades que empiezan a manifestar muchos de los miembros activos y adherentes de ese instituto político.
La conformación de grupos de poder al interior del albiazul durante ese lapso de tiempo, ha causado fisuras e inconformidades en virtud del reciclaje político de los mismos personajes promovidos por las facciones que, más que por ideología, han estado al acecho de sus propios intereses políticos y económicos.
Su presunto avance político pudiera revirarse si no son satisfechas las aspiraciones de quienes han servido como cimiento a los que hasta ahora han conseguido saborear las mieles del poder en sus diversos niveles oficiales y de elección popular. La raza de bronce panista reclama ya sus derechos.
Y es que la membrecía activa en la entidad la han mantenido en los mismos cinco mil 581, en tanto que a los adherentes, que suman nueve mil 830, no les han dado oportunidad siquiera de definir quiénes pudieran ser sus abanderados para contender en los próximos comicios federales.
A quienes se mantienen en la cima del poder panista no les es conveniente que crezca el número de militantes activos porque entonces se verían rebasados sus grupos con la conformación de otros nuevos. Es por ello que a quienes denominan como “miembros adherentes”, que han visto con capacidad intelectual y de organización, los han tenido durante años a la espera de poder cambiar su estatus para participar en las decisiones partidistas.
Esa actitud no es más que la necesidad de mantener vigente el dicho que reza: “que todo cambie para que todo siga igual”. Les es más redituable seguir así para mantener previo a cada elección el acuerdo cupular para copular al popular.
Aunque hay que decirlo: la decisión centralista de la dirigencia nacional del PAN de designar directamente candidatos en 200 de los 300 casos de aspirantes uninominales a ocupar una curul en el Congreso de la Unión, es una revelación de que esas actitudes de los grupos de poder han mermado la capacidad de penetración del blanquiazul entre el electorado.
No obstante, ello va en contra del impulso democratizador que desde su creación postuló Acción Nacional, cosa que si llegara a ver el ícono panista nacional, Manuel de Jesús Clouthier del Rincón, volvería a morir, pero de vergüenza.