TIJUANA B.C.-Uno de los costos del nivel de violencia en México y Centroamérica es la amenaza contra la democracia, opinó el sociólogo Emilio Álvarez Icaza, durante el seminario “Ciudadanía, Derechos Humanos y Paz" realizado en la Universidad Iberoamericana Tijuana.
“Lo que está pasando con los niveles de la violencia es que el fenómeno de la delincuencia organizada se esta convirtiendo en una amenaza a la democracia, es decir ya está generando una condición de subvertir el pacto social, ya está llegando a esa dimensión y se convierte en una amenaza hasta para lo más elemental, como el tener un negocio” mencionó.
Durante el último día del seminario transmitido desde la Ibero a la Universidad Javeriana, de Colombia; al Iteso, de Guadalajara; a la Universidad Loyola del Pacífico, de Acapulco y a las Ibero de Puebla y León, el ponente al hablar del tema de la violencia señaló que muchas familias están gastando en su propia seguridad poniendo bardas, rejas, alarmas o cerrando las calles y pagando a un vigilante.
Indicó que hay un fenómeno de privatización de la seguridad y como hay esa percepción de inseguridad la gente responde con fenómenos de privatización y quien puede pagar está protegido.
Al tocar el tema de la cultura para la paz y los derechos humanos, expresó que la experiencia del pasado impulsa la cooperación para construir condiciones permanentes de paz, estabilidad y desarrollo basados en el perfeccionamiento de la democracia y sus instituciones.
“Es una obligación de los estados proteger y fomentar la paz. El estado tiene que trabajar para hacer eso realidad y para llegar a este entendimiento a este valor hemos tenido que convertir en antivalor lo establecido; es decir que para llegar a la paz hemos tenido que asumir que la violencia es un antivalor y que lo establecido como violencia no es normal” añadió.
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